jueves, 5 de mayo de 2011
El fin no justifica los medios
Muchos antiamericanos de luto por el éxito de los Navy Seals al cargarse a Bin Laden repiten esos días aquello de que el fin no justifica los medios. Y yo estoy de acuerdo con el principio. Pero la clave de una prescripción tan abstracta es cómo se traduce a la práctica, porque si no se convierte en un mero latiguillo de uso a convenir. Está claro que si los americanos hubieran lanzado una bomba atómica sobre la localidad de Abbottabad, donde tenían localizado al angelito, el mundo entero hubiera condenado una salvajada semejante, y con razón. Esto es lo que significa la frase el fin no justifica los medios. No todo vale. O dicho de otro modo: Determinados fines justifican determinados medios, y no otros. A partir de aquí se podrá discutir sobre si deberían haber capturado vivo a Bin Laden arriesgándose a que los hiciera volar a todos con un cinturón de explosivos, por ejemplo. Pero esgrimir con tonillo triunfal la vaguedad tan traída y llevada del fin y los medios demuestra que algunos se preparan poco los temas.