domingo, 31 de julio de 2011

#echalelaculpaaoccidente

Inmediatamente después de la matanza de Noruega, muchos medios la atribuyeron al terrorismo islámico. A medida que llegaba más información, esta explicación fue rectificada. En las primeras horas, un periódico escandinavo habló de "fundamentalismo cristiano", y algunos todavía siguen repitiéndolo, a pesar de que tampoco es cierto. El asesino noruego, Anders Breivik, ha expuesto con detalle su ideología, de tipo nacionalista, desmarcándose explícitamente de cualquier modelo teocrático, como los que sí defienden los terroristas islamistas.

Sin embargo, aunque ya nadie habla de terrorismo islámico en relación a esa tragedia, los especialistas en la denuncia de la islamofobia, como la periodista Mónica G. Prieto, siguen en sus trece. ¿Quién puede pensar que un atentado podría ser obra de islamistas, sino quien abriga prejuicios contra el islam? En un breve reportaje publicado en El Mundo se hace eco de la iniciativa de una musulmana, creadora del hashtag irónico #blamethemuslims (échale la culpa a los musulmanes). Los musulmanes tienen la culpa de todo, de que se te derrame la cerveza, de que Inglaterra perdiera el Mundial de Fútbol o de que te abandone la mujer. Supuestamente, muy gracioso.

Puedo comprender que un musulmán se sienta mal porque mucha gente, desde el 11-S, lo mire con poca simpatía. Pero ¿quién tiene la principal culpa de ello? ¿Los terroristas que en nombre del islam estrellaron dos aviones contra las Torres Gemelas o los posibles prejuicios antimusulmanes de la gente? Sinceramente, lo que a muchos nos mosquea es que los musulmanes dediquen más tiempo a hacerse las víctimas de la xenofobia, real o imaginaria, que a protestar por las atrocidades cometidas por algunos de sus correligionarios. Por supuesto que los musulmanes no tienen la culpa de todo, y que la inmensa mayoría no son terroristas. Pero un poco de autocrítica, solo un poco, tampoco les vendría mal. No vamos a exigirles, claro está, que lleguen a los extremos de autoculpabilización de Occidente, que por supuesto sí que tiene la culpa de todo: la pobreza en el mundo, el calentamiento global, el conflicto palestino-israelí, etc. #echalelaculpaaoccidente.