Bildu quiere prohibir la religión en los colegios concertados
Y el texto inicial, antes de remitirnos a la sexta página, observa: "Ésta es una de las muchas sorpresas de su programa electoral desveladas ayer."
Para mí la sorpresa es que a alguien le pueda parecer que esto es una sorpresa. Pero lo realmente significativo es que tampoco podría sorprendernos en absoluto un titular como el siguiente:
El PSOE quiere prohibir la religión en los colegios concertados
Con ello no pretendo insinuar que el PSOE sea como Bildu, sino que Bildu es... como el PSOE. Ambos son progresistas. Ambos defienden el laicismo, el socialismo, el feminismo, el ecologismo y el pacifismo de los cementerios. La diferencia es que los de Bildu (todavía) no llevan corbata. Me acuerdo de los primeros informativos televisivos de la era Zapatero, en 2004, con los presentadores descorbatados. La tontería duró lo que duran las tonterías, es decir, bien poco. Pero ya anunciaba la mentalidad adanista del nuevo gobierno.
Por cierto, que la televisión pública, hoy con el PP, sigue siendo una máquina de desinformación repugnante. En el Telediario de las tres de la tarde de este domingo, el corresponsal en Venezuela ha evacuado una pieza de propaganda chavista impresentable, asegurando que la reducción de la pobreza es uno de los logros de la Revolusión, y entrevistando a familiares de Chávez que (¡oh, sorpresa!) no escatiman elogios para su pariente.
La sorpresa la tengo yo cuando un periodista defiende el mercado libre o el cristianismo. Y si hace las dos cosas a la vez, ya es que me quedo estupefacto.